Visión básica general
El ermitaño es un sabio anciano que ya ha recorrido un largo camino. A sus años y con su experiencia a cuestas, a superado estar solo sin sentirse mal.
Representa el paso lento llevado por tu sabiduría y experiencia. El Ermitaño ha llegado al final del camino. Ya Sabe, tiene un libro a sus pies y con su farolillo parece que alumbrara a los que vienen detrás, o quizás en busca de alguien que necesite luz, pero sin duda, él elegirá a quien ayudar, quien merece ser ayudado en el camino iniciático. Es la luz del conocimiento y con su manto protege los grandes misterios desvelados sólo a unos pocos. El nombre en francés LHERMITE hace referencia haciendo un juego de palabras, tan al gusto del Tarot de Marsella con HERMES TRISMEGISTO la gran figura mítica de la antigüedad que nos legó las 7 Leyes Universales en la Tabla Esmeralda. La palabra hermético viene de Hermes, el conocimiento oculto lo que es inaccesible, al menos para muchos….
En un aspecto negativo, el Ermitaño representa la soledad, el retiro y la ancianidad. Puede representar un ser huraño y ávaro que da la espalda a la vida. La soledad mal llevada.
La carta del Ermitaño nos invita al retiro espiritual en medio del bullicio de la vida ajetreada, nos invita a la meditación y la paz interior y nos hace recurrir a nuestra sabiduría interna. Todos somos un Gran Maestro y el Ermitaño nos lo recuerda a través de esta carta del Tarot.
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